Coches autónomos y carreteras inteligentes: ¿Cómo cambiará el transporte en el futuro?
La tecnología está avanzando a pasos agigantados y el futuro de las carreteras parece ir más allá de lo que imaginamos. La implementación de tecnologías como la Inteligencia Artificial, el Big Data, el 5G o el Edge Computing serán cruciales para la movilidad conectada, eficiente y sostenible del mañana.
Estudios afirman que las carreteras del futuro podrán prevenir y evitar atascos y accidentes gracias al análisis de datos. También podrán advertir la presencia de ciclistas o vehículos lentos y pesados para que los conductores puedan adecuar su ritmo de conducción.
En situaciones de emergencia, la tecnología será crucial. Si un animal salvaje se cruza en la carretera, el carril mostrará una advertencia y cambiará de color para que los conductores reduzcan la velocidad. Se enviará un mensaje a los vehículos cercanos de la situación de peligro y, en caso de accidente, se activarán automáticamente todos los protocolos de seguridad, alertando al resto de los conductores de la zona para que aminorasen la velocidad y evitar así nuevos incidentes.
La digitalización de las carreteras traerá grandes beneficios a través de la generación de información que, bien gestionada y analizada, puede mejorar la regulación del tráfico y ahorrar costes de mantenimiento. También puede dar lugar a nuevas empresas y servicios. Los ciudadanos también se beneficiarán, ya que podrán disfrutar de trayectos más rápidos y saludables debido a la reducción de la contaminación. Por último, la digitalización permitirá aprovechar mejor la infraestructura actual, alargando su vida útil y evitando la necesidad de nuevas vías.
